| Title | : | El misterio de la cripta embrujada |
| Author | : | |
| Rating | : | |
| ISBN | : | 8432231495 |
| ISBN-10 | : | 9788432231490 |
| Language | : | Spanish; Castilian |
| Format Type | : | Paperback |
| Number of Pages | : | 208 |
| Publication | : | First published January 1, 1978 |
Aparentemente nivelada y lisa, la escritura de Mendoza constituye un espléndido ejemplo de investigación literaria personal, ajena a todo mimetismo, que ahonda en las posibilidades de volver del revés, sin infringirlas a primera vista, las posibilidades del relato tradicional, e indagar así, como un buen detective, o como un personaje de Henry James en el dibujo que se nos muestra al dorso del tapiz de la trama. Una farsa burlesca y una sátira moral y social que tiene sus raíces últimas en la picaresca y en el modelo cervantino.
El misterio de la cripta embrujada Reviews
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A lo mejor si hubiera leído esta novela hace unos años, allá por los 80, me habría parecido bien escrita y fabulosa... pero me fue del todo imposible y la he leído ahora y, si bien me ha parecido original y bien escrita, no deja de ser irónica, llena de clichés de la época, vocabulario machista, sexista y todo lo -ista que se me pueda ocurrir.
Creo que es el primero de una serie, que no voy a continuar. -
¡Qué grata felicidad me produce leer al Eduardo Mendoza del detective sin nombre! ¡Qué afortunada sensación dejan estas novelas rayanas en el sinsentido, donde el humor y el ingenio del lenguaje hacen de la lectura un proceso de limpieza equivalente a tragarse un purgante metafísico!
Aplaudo de pie a estos libros capaces de desinfectarnos las cicatrices a carcajada.
Es esta la primera novela protagonizada por el detective sin nombre, paciente psiquiátrico recluso en el manicomio por motivos nunca explicitados y cuya narración en primera persona remite al siglo de oro español salpicado con un extra de rimbombancia destornillante (la errata significa: "capaz de aflojarte las tuercas").
La primera escena nos presenta, de plano, un partido de fútbol imposible entre los pacientes del manicomio. El equipo del narrador va ganando, pero la lluvia es asumida por uno de los defensas como signo del castigo materno y uno de los delanteros decide agarrar a cabezazos el poste derecho del arco contrario. Esa es la puerta de entrada, y eso se mantendrá a lo largo de toda la novela: cada situación más descabellada que la anterior en una espiral ascendente en donde el lector no puede sino agarrarse las costillas y dejarse llevar por el placer de la lectura.
Ahora bien, lo anterior no sería posible si ese narrador en primera persona no fuera tan jodidamente efectivo. El lenguaje, el español, es aquí un instrumento en perfectas condiciones. ¡Qué dicha esa gama amplia de significados! ¡Qué grande Mendoza por hacer que su personaje sea a la vez un loco y un trompetista del ejército al hacerlo afirmar que estudiaba para turuta! Un narrador que nos suelta, como si tal cosa, afirmaciones del tipo:Con este consuelo me metí en la cama y traté de dormirme repitiendo para mis adentros la hora en que quería despertarme, pues sé que el subconsciente, además de desvirtuar nuestra infancia, tergiversar nuestros afectos, recordarnos lo que ansiamos olvidar, revelarnos nuestra abyecta condición y destrozarnos, en suma, la vida, cuando se le antoja y a modo de compensación hace las veces de despertador.
Y esta otra:conozco, por desgracia, las dos caras del crisol, si la metáfora es válida, cosa que dudo, porque no sé lo que significa la palabra crisol.
O como estas dos zoológicas observaciones:de cuyo portal salió una lagartija que mordisqueaba un escarabajo mientras se debatía en las facies de un ratón que corría perseguido por un gato.
Y:Se había hecho tarde y las criadas se dispersaron como una bandada de tórtolas que, sobresaltada por un ruido súbito, alza el vuelo defecando para aligerar su peso.
Sin dejar de lado un erotismo adolecido de elegancia:sus mamellas, que un jersey de lana acanalada pugnaba por constreñir, pujantes y saltarinas. Imaginé que sería de las que se dispensan del sostén, categoría esta que cuenta con mi beneplácito.
O:Al inclinarse sobre mí para desembarazarme de la mosquitera, vi que debajo de la camisa llevaba unas braguitas azules no tan tupidas que no dejaran entrever un triángulo oscuro y desgreñado y en su envés sendos fragmentos de nalgas apretadas como el puño de un obrero en un mitín.
O, casi al final:Mercedes se bajó del coche sin decir nada y vi desaparecer sus oníricas sandías entre la multitud.
Creo que, lo que intento decir, es que estos casos del detective anónimo tienen todo el juego de pirotecnia: acción, romance, erotismo, misterio... Pero, sobretodo, fiesta. Fiesta en el lenguaje. Y ese es, junto a la ironía, su mayor mérito.
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Entretenido, divertido y ágil, para pasar un buen rato, pero poco más.
Tenía ganas de leerlo por ser de los más famosos de Mendoza, pero sus otros libros que he leído también me han hecho pasar buenos ratos, también son simpáticos pero su humor, siempre gamberro, me ha aportado más que en éste. -
Lo que me pude reír.
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Las enigmáticas desapariciones de niñas del colegio de las madres Lazaristas de San Gervasio son el punto de inicio de la aventura indagatoria que tiene como protagonista a un cliente del manicomio, quien, obligado a convertirse en investigador, se verá envuelto en toda clase de percances de los que logrará salir llevando a cabo su cometido y descubriendo una intrincada farsa de gente pudiente.
Aparentemente nivelada y lisa, la escritura de Mendoza constituye un espléndido ejemplo de investigación literaria personal, ajena a todo mimetismo, que ahonda en las posibilidades de volver del revés, sin infringirlas a primera vista, las posibilidades del relato tradicional, e indagar así, como un buen detective, o como un personaje de Henry James en el dibujo que se nos muestra al dorso del tapiz de la trama. Una farsa burlesca y una sátira moral y social que tiene sus raíces últimas en la picaresca y en el modelo cervantino.
Pues buena novela negra llena de sarcasmo, sátira social y humor de la mano del escritor catalán Eduardo Mendoza, que entre otros ha sido Premio Cervantes o Planeta.
Mendoza explica en el prólogo que esta novela fue escrita en Nueva York tras un breve viaje de regreso a su Barcelona natal (y publicada con muchas dudas en 1978), muy querida por él y que será el escenario donde se desarrolle la novela, una obra que al final fue un gran éxito de ventas.
La obra está encuadrada en la época post-franquista y es la primera parte de una saga protagonizada por un peculiar detective que sale del manicomio para investigar en este caso la desaparición de una niña en un colegio de Monjas, y que finalmente derivará en el descubrimiento d euna trama mucho más intrincada en la que los poderes de la burguesía catalana de aquellos años tendrán también su protagonismo en el devenir de la historia principal. Es una novela divertida y esperpéntica, con un lenguaje muy peculiar y sobre todo un estilo narrativo muy especial en el que el autor parece que desarrolla un diálogo con el propio lector, y que al principio se hace un tanto extraño pero que termina por cuajar perfectamente y te deja buen sabor de boca. Quizá el lenguaje empleado no sea el más "políticamente correcto", pues hay muchos clichés machistas y sexistas, pero creo que hay que entender la época en que se escribió el libro y sobre todo el contexto en el que se desarrolla la trama, con unos personajes muy surrealistas, que se mueven por los bajos fondos como pez en el agua y que por momentos llenan la historia de adjetivos absurdos y situaciones de lo más extrañas.
La novela es muy corta y una vez te haces con el lenguaje que utiliza Mendoza, todo fluye de una forma muy sencilla y el resultado es una novela negra de bastante calidad. Creo que el autor tiene mejores libros que este, así que investigaré en su bibliografía y seguro que vuelvo a la obra de Mendoza en algún momento. -
Primera lectura de este autor. Libro eminentemente humorístico y satírico que usa como excusa un transfondo policíaco para hacer todo tipo de juegos con el lenguaje y con la psicología del protagonista anónimo, los cuales sacan más de una sonrisa y alguna carcajada.
Podría pensarse que al tratarse de una obra de finales de la transición su humor podría quedar algo desfasado, en este caso, para nada. Es un humor basado en la compilación y en lo alambicado del lenguaje, tratando de esta forma de meternos en la mente de un supuesto loco de atar que se convierte en investigador improvisado para lograr su libertad. Resulta finalmente no estar tan loco y ser extremadamente hábil en los métodos deductivos.
La novela satiriza totalmente la literatura policíaca, haciendo transcurrir las pesquisas e investigaciones por toda suerte de situaciones surrealistas. A pesar de reírse de el género, presenta una estructura muy conocida, basada en la presentación de un misterio casi irresoluble, para luego seguir con las pesquisas y terminar con un monólogo del investigador que desvela todos los recovecos del misterio. En este caso no se da apenas posibilidades a los lectores para averiguar el misterio (no hay seguimiento alguno de las normas del whodunit clásico), ya que no es un novela policíaca al uso, de forma que el transfondo criminal es tan solo un escenario del cual el autor hace uso para elaborar una lograda novela de excelente humor.
4.5 estrellas, muy recomendable. -
Empieza mal. Por momentos parece que puede remontar y me veía intentando justificar las tres estrellas, pero a punto ha estado de caerle una solamente.
Lo he leído como preparación para La Ciudad de los Prodigios, que me han recomendado encarecidamente y que leeré en breve. Espero francamente que sea radicalmente diferente porque si no, mal vamos. -
Al final del libro el protagonista explica la enseñanza de este libro y es que aunque no te hayan dado lo que te han prometido, al menos, has vivido el momento y lo has disfrutado y hay que vivir la vida disfrutando de lo que nos ofrece. Me ha enganchado bastante.
"El misterio de la cripta embrujada" de Eduardo Mendoza -
La verdad es que no le tenía MUUCHA fe a este libro cuando lo arranqué. Si bien me llamaba la sinopsis, la portada del ejemplar que yo tenía era bastante feucha y no prometía nada. Así que grande ha sido mi sorpresa al darme cuenta cuánto me gusto este libro.
La trama se basa en un personaje que ayyy, cada salida tiene!! Me ha hecho matar de risa. Se supone que es un loco del manicomio pero de loco no tiene un pelo, ahora de desfachatado los tiene todos!
Se le encomienda resolver un misterioso caso en el cual desaparecen por algunos días unas niñas pupilas de un colegio religioso, al que regresan después sin recordar nada. Ni dónde estuvieron, ni como salieron o como regresaron. Como recompensa de resolver tan extrañas desapariciones se le ofrece la libertad.
Y así, con una mano atrás y otra adelante que es como lo largaron a su misión, este personaje tendrá que recurrir a los mas disparatados planes y realizar grandes proezas para poder llegar a la conclusión del caso.
El libro tiene tan solo 200 páginas y se lee rapidísimo. La escritura es muy fluida para la época en la que fue escrito. Tiene un humor mas bien irónico e incoherente. Porque realmente el personaje tiene una forma de ser y de razonar que es para matarse de risa.
Realmente muy, muy recomendado. Me encantó y fue algo diferente a lo que estoy acostumbrada a leer. -
Set in 1970s Barcelona, this is a fast-paced mystery narrated by a streetwise 'lunatic' who is released from an asylum in order to aid the police in locating a missing girl. The narrator is witty, charming, and clever, as well as a typical male chauvinist. He's also the glue holding this rather mundane mystery tale together. Unfortunately it's unclear if Mendoza simply wants to tell us an entertaining story or if he wants to critique post-Franco Spanish society. The novel is just not long and substantial enough to facilitate both, regardless of whether he is on point or not with his jabs at classism and other social ills. There are definitely some amusing moments, but the mystery itself fails to deliver on its promise. Still, it was a nice distraction from more involved reading.
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Leí esta novela hace ya bastantes años y guardaba de ella un muy grato recuerdo. He de decir que su segunda lectura no me ha decepcionado en absoluto. Todo lo contrario.
Las desventuras del innombrado (y forzado) detective son geniales. Uno de los personajes más descacharrantes de la literatura española de los últimos 50 años, sin duda. La maestría con que Medonza traza la parodia (un género injustamente denostado y olvidado hoy día) es admirable. Mezcla de humor escatológico, sátira social y fábula surrealista a partes iguales, la narración no cae en el mal gusto o en lo banal, regalándonos ratos de verdadero placer.
Divertidísima. -
Lo he releído porque mis hijas se lo tienen que leer para el instituto. Al principio cuesta, es verdad, por la forma de hablar del personaje principal, pero luego le coges el tranquillo.
Sin embargo, me gusta mucho más Mendoza cuando se pone serio. Excepto, tal vez, "Sin noticias de Gurb". -
Bastante entretenido y muy rápido de ritmo. No me tocó especialmente la fibra cómics aunque debo reconocer que puede ser muy divertido. El protagonista es tan irreal como entrañable. Me encantó ver que nada ha cambiado con la RENFE desde 1975!
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Vamos a ver. Eduardo Mendoza es un "enamorador"; es un escritor que te encandila con una maestria literaria llena de peripecias, vericuetos y picaresca. Comienzas a leerle desde las primeras lineas y no paras de destornillarte de risa hasta el final. Es UNICO. A mi parecer no existe un escritor como el en la historia de la literatura. Sus libros son las Biblias del humor. Si quieres pasar un buen rato, esta novela esta inundada de aventura, humor a caudales, un argumento "maquiavélico" a la española y a modo personal...confesar que cada vez que tengo señales de posible depresión debido a la mierda que nos rodea, solo tengo que ponerme a leer este libro y no solo se me van todos los males, si no que me lleno de energia pa' seguir pa'alante. Altamente recomendable. Genero único mezcla de suspense, humor, detectivesco y hasta psicologico.
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This book was such an awesome read. Not only is the narrator of the story really funny, but the takes you on an awesome adventure. This is one of the best detective stories ever. Picture a crazy Sherlock Holmes that just came out of an institution and is forced to investigate a crime...that's what this book is. The other amazing thing about this book is that its so descriptive and its easy to follow. It's really one of those books that you can definitely picture as a movie. It has all the elements that are needed; great suspense, an amazing protagonist, and a very funny plot. I highly recommend this book. It's a very quick read and you will want to finish the book in one sitting.
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Todo el libro esperando a que el prota se duche y deje de hablar de tetas, pero, oh sorpresa, no ocurre. Aventurilla delirante y entretenida en la que un señor casposo sale del sanatorio, tras la desaparición de una niña en un colegio de monjas, para lucir Poirot de los bajos fondos. Nadie vino aquí por la trama policiaca.
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Mayo: un libro escrito en la década en la que naciste. Me ha sacado más de una sonrisa y hasta alguna carcajada. Se pasa un buen rato con este detective tan poco común.
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Desafortunadamente este libro se va a los estantes de las historias que pasaron sin pena ni gloria. Sin duda se aprecia que es un thriller distinto, con tintes de sátira y humor, pero el misterio planteado no llegó a apasionarme y me distraían las interrupciones del narrador con sus peripecias de la trama central. Honestamente, al final ya había perdido interés en descubrir quién estaba detrás del misterio. Quizá por el título del libro esperaba más una historia de suspenso, de terror incluso, pero
El misterio de la cripta embrujada se acerca más, me atrevería a decir, a libros como El Periquillo Sarniento o el Lazarillo de Tormes. Y de hecho, estas obras me parecieron estupendas, solo que no estoy segura que la mezcla de géneros haya resultado para esta historia. -
Me ha parecido original y fácil de leer, pero no me ha parecido divertido, me han hecho publicidad engañosa, todo el mundo me dijo que con este libro me reiría muchísimo y a mí me ha parecido un humor que no es el mío, demasiado soez.
Por lo demás la historia está bien, una narración en primera persona de un loco que se pone a investigar para que le saquen del manicomio con una hermana puta y entre cuyas artes se encuentra el robo y el engaño. El misterio ha estado bien, pero a mí me ha parecido como si fuese narrado por el Lazarillo de Tormes, lo cual no es malo, pero tampoco es mi ideal.
Creo que me leeré el de sin noticias de Gurb y si no veo el por qué gusta tanto Eduardo Mendoza lo dejaré descartado o descartaré mi sentido del humor que no va con el resto del mundo. -
Entretenido y corto.
El libro se centra en un misterio con un protagonista al que le encargan que consiga información para resolver el caso. Está narrado desde su punto de vista.
Ha sido una lectura muy rápida porque es un libro más bien corto. También ha sido entretenido al querer saber más del misterio y a ratos ha sido gracioso.
Pero el protagonista tiene muchos comentarios que no me han gustado y la historia no ha sido tan impresionante como me esperaba.
Aún así ha sido una lectura ligera y me ha gustado pero no creo que continúe con la serie. -
Le pongo 5 estrellas porque este libro es un clásico de mi infancia, con el que solté no pocas carcajadas y aprendí muchas cosas sobre los bajos fondos y los inadaptados sociales, en su momento. Ha sido un placer revisitarlo.
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Lo lei hace muchísimo tiempo (instituto creo...) y recuerdo que fue muy entretenido y divertido por momentos. 8/10
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El misterio de la cripta embrujada = The Mystery of the Bewitched Crypt
A comic crime story narrated by a lunatic who is released from an insane asylum in order to investigate the mysterious disappearance of a girl from a convent boarding school. The protagonist's way of approaching the problem is absurd and extemporaneous, but that is exactly what makes it possible for him to unravel the mystery’s convolutions. Particularly amusing is the tendency of his thoughts to digress from the point before him into totally irrelevant tangents. I also laughed at his sudden descriptions of random insignificant details in the middle of serious situations. I had fun with this book. It was at once Kafka and Sherlock Holmes and Gothic and Noir -- but screwball.
The book is set in Spain during the transition from Fascism to Democracy in the 1970s. And there were several comments on contemporary Spanish affairs. So Mendoza may have been mocking his political moment. I think metaphorically he is referring to how people can hide their malintent and misdeeds beneath a veneer of religiosity; and the willingness of some to use the innocence of others as means to an untoward end. Also there is probably something meaningful in having to rely on a societal outcast to dig out the truth.
Oh, yeah. And there are these recurring references to the protagonist’s body odor. The story moves so fast that he never gets to bathe. -
Creo que en lo que más "mal" ha envejecido este libro para mí es que hay muchas situaciones que estaban pensadas para hacerme gracia, y muchas veces lo ha hecho, pero muchas otras me ha puesto algo triste. Y no porque piense que no se debería hacer bromas sobre según qué, es más bien la diferencia de lo bien que se venden los años después del franquismo y la realidad; por supuesto siempre la de los mismos, los que estaban bien siguen bien. Mendoza describe el libro en el prologo como "esperanzador" y yo eso no lo he sentido, supongo porque sé que cosas van a ir a mejor, pero también cuales a peor.
La otra cosa es que la resolución del misterio me ha decepcionado un poco, pero eso casi siempre me pasa con el género de misterio.
Por lo demás es un libro entretenido, con un estilo relajado muy refrescante de leer, un retrato de España muy valioso, y un protagonista al que vas cogiendo más cariño, y te da hasta rabia que no sepa el tío lo listo que es. Y quiero mucho a Mercedes. Todas somos un poco Mercedes.
A ver cuándo me leo el segundo. -
Entretenidísimo libro que narra las aventuras y desventuras de un personaje gamberro que tienen que desenmascarar el misterio que le granjeará su libertad.
Sencillo de leer pero con un estilo propio característico del autor. Me he reído mucho con las ocurrencias del protagonista.
Me ha encantado leer un libro en el que tengo que buscar palabras en el diccionario, se agradece la riqueza de vocabulario, cada vez menos frecuente en la literatura contemporánea.
Sin duda seguiré leyendo las aventuras del paciente del doctor Sugrañes. -
Al principio me costó engancharme. El lenguaje y la prosa de Mendoza son muy peculiares y necesitas un tiempo de adaptación. Poco a poco se convirtió en una lectura ágil y la historia cada vez era más misteriosa y con momentos muy graciosos (muy del escritor). Al final me ha encantado.
Un libro muy breve que se disfruta y consume rápido. -
Un libro ligero pero muy bien escrito, según el prólogo, es la segunda novela de Eduardo Mendoza, según el prólogo, el protagonista es un secundario de la primera, "la verdad sobre el caso Savolta", que tambien tendré que leer, no obstante, esta novela va en la tónica de las pocas que he leido de el, con un argumento consistente, unos giros humorísticos de lo más insospechados, un protagonista al que a pesar de todos sus defectos, no puedes evitar cogerle cariño, y mucha, mucha literatura, reconozco que he tenido que tirar de diccionario unas cuantas veces.
El final, aún siendo autoconclusivo, quizas no era lo que me esperaba, pero por suerte me enteré antes de terminarlo que este es el primero de una serie de 5 libros con el mismo protagonista, con lo que entiendo que el final sería un poco abrupto por que queda mucho por contar (con lo que me gustan a mi los epílogos que te lo dejan todo masticadito) asi que nada, habrá que leerse los otros cuatro. -
He le��do de forma desordenada los tres libros de Eduardo Mendoza protagonizados por su absurdo detective sin nombre encerrado en un manicomio. El misterio de la cripta embrujada es el primero de todos ellos y el ��ltimo que yo he le��do. Es el que m��s me ha gustado de todos. La narraci��n es tan ��gil que da la sensaci��n de que el libro corre delante de ti y las p��ginas pasan solas. S��lo Eduardo Mendoza es capaz de combinar palabras de esta manera. Cada frase es m��s divertida e ingeniosa que la anterior. Espero terminar todas las novelas del se��or Mendoza este a��o y estoy convencida de que no me va a defraudar en ninguna de las que me quedan.
Por supuesto, totalmente recomendable. -
No me ha gustado. Se trata de una pretendida historia detectivesca en la que, por motivos que no resisten una mínima inspección, un delincuente es liberado del manicomio para desentrañar el misterio de las desapariciones de unas niñas en un colegio de monjas. El detective narra el caso en una primera persona redicha, extraña y pretenciosa. Le suceden unas aventuras ridículas, de trazo grueso y poco interesantes y tras un supuesto clímax onírico resuelve el caso sin que nada de lo ocurrido tenga relevancia y sin que se comprenda cual es el motivo por lo que fue necesario involucrarle. Además en el prólogo el autor, que de paso reconoce que ni siquiera se molestó en revisar su obra, se arroga haber realizado un retrato de la Transición Española. Debe se un retrato abstracto.
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Cada cierto tiempo necesito regresar a algunos autores en concreto, a algunas obras en concreto, y es lo que me sucede con Mendoza. Esla cuarta relectura que hago de este libro (la primera como simple lectora, la segunda muchos años después con mis alumnos de bachillerato para la PAU, la tercera por puro capricho hará tres años) y de nuevo, peco con ella otra vez.
Para mí es un ejemplo de maestría narrativa, de estilo, de inteligencia humorística y de saber hacer. Es imposible no disfrutar con este libro. Si no lo haces es que estás muerto ;)
Nota: 9/ 10
